domingo, 29 de marzo de 2015

BJARNE RIIS POR FIN DESPEDIDO

Bjarne Riis y Oleg Tinkoff, sonrientes y enfundados
en los colores del equipo. Eran otros tiempos.
Con el inicio de la primavera, la vida renace, el hielo se descongela, los árboles y plantas que perdieron sus hojas en otoño vuelve a reverdecer y florear atrayendo a poblaciones enteras de animales que habían huido a climas más cálidos o habían hibernado. Esa vida que parecía haberse detenido, estalla en multitud de formas y colores, regresa el sol y el calor y desde hoy mismo con el cambio de hora los días son más largos. Llega el momento de quitarle las telarañas y el polvo a nuestras bicicletas que estuvieron invernando colgadas en el trastero. Seguro que a más de uno ya se nos agotaban los agujeros del cinto al tiempo que necesitamos ir preparando ese palmito para lucir este verano.
Con la llegada de la primavera como muy bien dice el refrán: “la sangre altera” y la actualidad ciclista no cesa. Las clásicas y las carreras por etapas de una semana se van abriendo pasó en esta época del año llena de competición. Paralelas a la Volta a Cataluña se disputaron carreras menores como la Clásica de Córcega, la Volta al Alentejo, el Tour de Taiwán, el Tour de Normandía o el Criterium Internacional. Clásicas como la E3 Harelbeke, a Traves de Flandes o la Gante-Wevelgem..
Pero a quien de verdad se le altero la sangre esta primavera ha sido al dueño del Tinkoff-Saxo, el excéntrico Sr. OlegTinkof, que, ni más ni menos, ha decidido dejar al margen al máximo responsable deportivo de su entidad debido a los malos resultados y que hoy mismo el propio equipo anunció la rescisión del contrato a Bjarne Riis con efecto inmediato.
Este magnate frustrado y caprichoso vuelve a hacer una de las suyas. Hartado de los fracasos en este inicio de temporada ha decidido cortar de forma tajante con Bjarne Riis máximo responsable deportivo del equipo Tinkoff-Saxo.
En un principio desde el equipo decían que no había despido ni sustitución, solo que Riis dejaba de estar involucrado activamente en las actividades del equipo, hoy ya vimos que el despido era oficialmente confirmado a través de un comunicado.
La sangre alterada de esta primavera del Señor Tinkov le volvió hacer otra cacicada. Con razón o sin ella, lo cierto es que esta decisión hizo que el equipo sea un polvorín lleno de inestabilidad, cuando lo que necesitaba era todo lo contrario, tranquilidad para poder afrontar los grandes objetivos del año: las clásicas con Peter Sagan y el  Giro y Tour con Contador.
Este colérico e imprevisible OlegTinkoff es un magnate que alardea de su cartera, presumiendo de que como paga manda, pudiendo adoptar decisiones contundentes. Un ciclista frustrado que compitió en categorías inferiores y que siempre soñó con ganar el Tour de Francia, motivo que le llevo a comprar la estructura del Saxo Bank para disfrutar y promocionarse con su deporte favorito.
Este impetuoso empresario lleva un tiempo intentando convulsionar las estructuras del ciclismo. Primero incitó a los principales rivales de Alberto Contador para que desafiaran al español en la pugna por lograr Giro, Tour y Vuelta en una misma temporada. Después a través de las redes sociales critico el trabajo de sus corredores y empleados. Ya en 2013 tras terminar Alberto Contador cuarto en el Tour de Francia había dicho que el sueldo que ganaba el madrileño no se correspondía con su actuación, creyendo que era demasiado rico y que no tenía hambre de triunfos, incitándole a que tenía que trabajar más duro. Y ahora, a menos de dos meses del inicio del Giro y a algo más de tres para el Tour, se salta los tradicionales protocolos de este deporte destituyendo al máximo responsable del equipo.
Oleg Tinkoff, junto a Riis y Contador
Se nota que ésta acostumbrado a alcanzar lo que desea, por eso no asimila que después del desembolso elevado que realizo esta temporada no se produzcan los resultados inmediatos, y que él esperaba. En estos tres primeros meses de la temporada con solo dos triunfos, los logrados por Contador en Andalucía y el de Peter Sagan en la Tirreno-Adriático le alejan muy mucho de las perspectivas de este impetuoso y caprichoso empresario ruso.
Por eso es que está impaciente, no asume que los retos del Pistolero de Pinto para conquistar el Giro y el Tour precisan de un programa de trabajo diferente.
Al prescindir de Bjarne Riis, genero una nociva inestabilidad que el propio Contador en declaraciones a la prensa durante la disputa de la Volta a Cataluña dijo que necesita saber que ha pasado ya que Riis ha sido muy importante en su trayectoria deportiva, hoy después de finalizar en cuarto lugar la Volta a Cataluña de no saberlo seguro se enteraría, ya se verá si estos acontecimientos terminan por pasarle factura.
El adinerado y caprichoso OlegTinkoff sostenía que la destitución de Riis no respondía a cuestiones deportivas ni económicas, por lo que abría la puerta a las especulaciones. En Dinamarca se comenta que la razón podría encontrarse en una investigación sobre dopaje en la que podría estar implicado.
Bjarne Riis desde que el 25 de mayo de 2007 convulsionara al mundo del ciclismo al confesar en una rueda de prensa de haberse dopado con EPO no es santo de mi devoción y nunca acepte que un dopado confeso pudiese seguir en el mundo del ciclismo. Tras declarar seguramente arrastrado por la cascada de arrepentidos en el Telekom de aquellos años que había consumido EPO, cortisona y hormonas del crecimiento entre 1993 y 1998, siguió dirigiendo al CSC con el que condujo a Carlos Sastre a la victoria del Tour de 2008 y hasta ahora al Saxo Bank de Alberto Contador y Cia.
Para documentarme y escribir este post leí el libro Nubes y Claros del Bjarne Riis, me sorprendió la crudeza, la sinceridad y el detalle con la que aborda los episodios más dramáticos de su trayectoria, explicando sin tapujos las prácticas dopantes de su época como corredor,  al tiempo que subraya su compromiso y el de su equipo el empeño de pasar página e iniciar una nueva época en el ciclismo, en la que el dopaje no tenga cabida (¿será cierto?, ¿le podremos creer?).Pero más allá de esa faceta morbosa, que no me dejo indiferente, el libro supone un testimonio extraordinario de los últimos 30 años de la historia del ciclismo profesional, escrito por uno de sus protagonistas más significativos.
También dice que no se arrepiente de nada ya que el dopaje era parte de la cultura del ciclismo de la época. Efectivamente, la prueba la tenemos en el podio del Tour de Francia de 1966 que ganó, un podio ocupado por Jan Ullrich, que fue sancionado definitivamente y con demasiada tardanza en 2012, por algo que ocurrió en 2006. La suspensión que le impuso el TAS fue de dos años y la eliminación de sus resultados a partir de mayo de 2005. Al menos se libró de la sanción de por vida por reincidente, ya que la vez en la que fue sancionado por consumo de anfetaminas no se consideró como dopaje.
Para que nos demos cuenta de cómo estaba el patio en aquella época. Ullrich al perder la tercera posición del Tour de 2005, pasó a ocupar ese puesto Francisco Mancebo y la general de la Vuelta a Suiza de 2006 también ganada por el alemán paso a Koldo Gil.
Riis junto con Tinkoff, Contador e Ivan Basso.
Curiosamente, dos ciclistas españoles beneficiados pero que también estuvieron metidos e identificados en la Operación Puerto, solo que aquí, por eso de que España es diferente, se le dio carpetazo al asunto de manera elegante y un poco sospechosa.
El tercero del podio de 1996 fue Richard Virenque, que en 1998 fue uno de los que más sonó en el denominado “Caso Festina”, siendo acusado de doparse de manera sistemática a pesar de que él proclamase entre lágrimas una y otra vez que era inocente. Sin embargo, dos años después admitió haberse dopado siendo sancionado durante medio año.
Sea como fuere, la lista de ganadores, de podios y de líderes de la general tuvieron que retirarse ante los análisis positivos por dopaje. Tras los cinco Tour logrados por Miguel Induráin, existen podios donde los tres primeros de la general se vieron envueltos en tramas de dopaje acabando por ser sancionados. No hay más que recurrir a la hemeroteca para ver que en 1996 los tres primeros fueron: Bjarne Riis, Jan Ullrich y Richard Virenque. 1997; Jan Ullrich, Richard Virenque y Marco Pantani. 1998; Marco Pantani, Jan Ullrich y Bobby Julich. Todos ellos fueron años más tarde sancionados, pero no desposeídos de sus victorias, hasta que llego la etapa esplendorosa de Lance Armstrong que también se encuentra manchada por el dopaje. Siete Tour borrados de golpe y porrazo por la sanción impuesta por la UCI que decidió desposeerle de esos títulos ganados a base de trampas como él mismo reconoció. Lo mismo que fue sancionado de por vida ya que gentuza de esa calaña no tienen que tener sitio en el ciclismo. De esos siete Tour ganados por el americano, en cinco de ellos, sus acompañantes en el podio final acabaron unos más tarde que otros saliendo a la palestra por dar positivo: Ullrich, Joseba Beloki, Raimondas Rumsas, Alexander Vinokourov, Ivan Basso (actualmente en el Saxo-Tinkoff) y Francisco Mancebo.
Los únicos tres ciclistas que faltan en los podios de esos años son: Fernando Escartin, Alex Zülle y Andreas Kloden que aunque nunca se pudo demostrar su culpabilidad, también han salido relacionados en algún tema de dopaje. Escartin tenía como médico a Michelle Ferrari, el mismo que trataba a Armstrong. Zülle, estuvo envuelto en el caso Festina y corrió para la ONCE de Manolo Saiz, el cual fue detenido por su relación con la Operación Puerto. Kloden, gran amigo de Ullrich, fue acusado en 2009, en el marco del Caso Friburgo, por doparse durante el Tour de Francia de 2006, donde finalizó segundo tras la sanción a Floyd Landis, tras llegar a un acuerdo con la fiscalía de Bonn pagó una multa de 25.000 euros a cambio de que se parasen las investigaciones existentes contra él.
Dicen que no hablan las plantas, ni las fuentes, ni los pájaros, ni el onda con sus rumores, ni con su brillo los astros, lo dicen, pero no es cierto, pues siempre cuando yo paso, de mí murmuran y exclaman…” (Rosalía de Castro).
Es innegable que en el ciclismo el dopaje existió, posiblemente todavía exista y existirá, de igual modo que en la sociedad existen otras trampas, otros delitos y otros problemas. En el ciclismo solo se necesita querer luchar contra esa lacra del dopaje y con contundencia, sin miedo a que tiemblen las manos contra los tramposos. Pero también es cierto que eso no significa que todos los ciclistas se dopen. Si a nuestros jóvenes les proporcionamos una buena educación, el deporte será cada vez más limpio. Entre todos, debemos enseñar a los jóvenes a ver dónde están los límites tanto legales como, especialmente, los que afecten a la salud.

Sé que la vida de los ciclistas no suele ser muy larga, por mucho dinero que ganen ¿de qué les va a servir, si no pueden conservar la salud?.

xoves, 26 de marzo de 2015

EMILE DAEMS

Emile Daems naceu en Genval, Brabant (Bélgica), o 4 de abril de 1938.
Ex ciclista belga que comezou a súa carreira profesional como independente. Corredor de pequena estatura, pero hábil e moi brillante no sprint. A súa carreira foi breve, aínda que boa.

 Aínda que tradicionalmente era alérxico á montaña, gañou unha etapa do Tour de Francia de 1962 tras subir o Restefond, o Vars e o Izoard.

Unha grave caída nos Seis Días de Bruxelas de 1965 puxo fin á súa traxectoria.
Profesional de 1959 a 1966 durante os cales gañou unha Paris-Roubaix, unha Milá-San Remo e o Tour de Lombardía, ademais de dúas etapas no Xiro de Italia e catro no Tour de Francia.

Moitos anos logo da súa retirada o seu fillo Corneille Daems debuta tamén como ciclista profesional.
Logo da súa retirada do ciclismo profesional abriu un restaurante no seu Genval natal.

TRIUNFOS: 1959 vencedor da Hoeilaart.Diest-Hoeliaart.
1960 vencedor do Xiro de Lombardía, do Xiro Apenino, do Putte-Kapellen e do Tour Oeste.
1961 vencedor do Xiro a Cerdeña, do Weekend Valón, do Ath-Flobecq e do Xiro de Ticino.
1962 vencedor da Milán-San Remo, do Xiro Ticino e do Circuíto Limburgo.
1963 vencedor da Paris-Roubaix e da Bucles Roquevairoises.

1964 vencedor do Campionato Brabant.
1965 vencedor de Templeuve.
XIRO DE ITALIA: 1960 (84º, máis dúas etapas), 1962 abandonou. 
TOUR DE FRANCIA: 1960 antes de abandonar gañou unha etapa, 1962 (13º, mais tres etapas), 1963 (67º) e 1964 abandonou.
Nunca participou na Volta a España.
Outros resultados dignos de mención: 1962 segundo na Paris-Roubaix, terceiro no Campionato de Bélgica de fondo en estrada e segundo na clasificación xeral do maillot verde do Tour de Francia.
EQUIPOS: 1960-1962 Philco, 1963-1964 Peugeot-BP, 1965 Peugeot-BP-Michelin e 1966 Só-Superia.

domingo, 22 de marzo de 2015

EL ESCARABAJO NAIRO QUINTANA CONQUISTA LOS DOS MARES

Desde que TVE a través de su canal de Teledeporte decidiera apostar por el ciclismo, algo que todos los aficionados al ciclismo llevábamos tiempo pidiendo a gritos, menudas tardes nos estamos encontrando. Lo vimos la semana pasada con dos carrerones como fueron la París-Niza y la Tirreno-Adriático que los ciclistas hicieron emocionantes y los aficionados pudimos disfrutarlas en directo. Estamos de enhorabuena.
En la carrera de los Dos Mares, un escarabajo llamado Nairo Quintana que el pasado 4 de febrero cumplió 25 años, que corre desde la temporada 2012 en el equipo español Movistar Team, y que cada vez él mismo pone el listón más alto y más difícil pero que gracias a su preparación sigue creciendo, se hizo con la clasificación general de la Tirreno-Adriático tras mantener el liderato en la última contrarreloj. Una pelea por ese primer puesto que supo aguantar y por la que también peleaban Bauke Mollema y Rigoberto Uran. Nairo entró en la posición cincuenta y cinco a 55 segundos de Fabian Cancellara ganador de la etapa. Pese a perder 21 segundos con Mollema y 17 con Uran, la diferencia fue suficiente para alzarse por primera vez en su carrera con la general final de esta Tirreno-Adriático 2015.
El ganador del último Giro de Italia heredó el Tridente de los Dos Mares del hasta ese momento campeón Alberto Contador, el escarabajo volvía a sonreír en Italia como ya lo hiciera hace nueve meses al coronarse líder del Giro y después de haber sido segundo el año pasado por detrás del Pistolero de Pinto.
Sus primeras declaraciones fueron para decir que: “Necesitaba esta victoria para la mente”, “Es una victoria muy importante porque me da la tranquilidad que necesitaba”. Efectivamente, hacia ya medio año que el escarabajo no cantaba victoria. Su último triunfo fue en la Vuelta a Burgos, luego vino la caída en la Vuelta a España cuando marchaba líder en la crono de Borja y la del día siguiente camino de San Miguel de Aralar que le forzó a abandonar, iniciándose una sequía que acabo en San Benedetto del Tronto con la victoria en la general final de la Tirreno.
Esta victoria viene avalada por su exhibición en el Terminillo, donde ni la nieve ni la climatología pudieron frenarle. Nairo siempre cuenta una anécdota que ilustra su personalidad. Su padre conducía una vieja camioneta repartiendo fruta en el municipio agrícola de Combita y para medir la gasolina que llevaba en el depósito usaba un palo, después de introducir la vara en el depósito sabía los kilómetros que le quedaban en el reparto. “Yo conozco mi cuerpo, igual que mi padre su furgoneta”, metáfora que explica su infancia rodeada de dificultades económicas, con un padre discapacitado por un accidente y un trasiego diario para acudir a la escuela. Este escarabajo se inicio en el ciclismo debido a que tenía que cruzar un puerto de 16 kilómetros con una vieja bicicleta acompañando a su hermano Dayer (hoy también ciclista del Movistar) y tirando de una cuerda de la bici de su hermana.
Hoy ese ciclista, es algo más que el ciclista de moda, el triunfador el año pasado de un Giro de Italia fantástico, el reciente rey de los Dos Mares o el seguro candidato a ganar uno de los próximos Tour de Francia, su objetivo principal, si no es el de esta edición. Sin duda será uno de los grandes favoritos, que también optara por el título de la Vuelta a España así como de la mayoría de carreras que dispute, porque esa es su mentalidad y donde radica gran parte de la fortaleza que representa la esencia del ciclismo, el vinculo de este deporte con la tierra y la reconciliación de la gente con el ciclismo.
Colombia siempre fue especial en el ciclismo. Sus escarabajos representaron, representan y representaran el verso suelto, la singularidad de un deporte singular, que lo mismo que se dice de Sevilla, tienen un sabor especial: por presencia, discurso y actitudes en carrera.
El inicio de temporada de los escarabajos colombianos y las expectativas que se han creado en torno a este 2015 son muy grandes llegándose a pensar que hay ciclistas para disputar los honores en todas las pruebas del calendario de la UCI., ya lo hicieron anteriormente ciclistas como: Álvaro Mejía, Santi Botero, Cacaíto Rodríguez, Félix Cárdenas, Cochise Rodríguez, Lucho Herrera, Patrocinio Jiménez, Martín Farfán, Oliverio Rincón, Fabio Parra y ahora Nairo Quintana, que para este año el Tour es su objetivo principal, siempre lo quiso y le gusta esa carrera. El año pasado después del Giro se emociono al ver a toda Colombia vestida de rosa, este año espera luchar para que todos los colombianos se vistan de amarillo.  
Dentro de poco hay otros escarabajos llamando a la puerta y que son: Rigoberto Urán, que el pasado 28 de enero cumplió esos mismos años, cuenta entre sus grandes armas para esta temporada: la madurez, la experiencia y la regularidad. Sus planes son hacer el doblete (Giro y Tour) por lo que tuvo que cambiar su calendario un poco, después de conocer el recorrido del Giro cree que lo puede hacer bien, siendo su objetivo estar entre los mejores, en el Tour será diferente, aunque también tratara de hacerlo bien pero estará más enfocado a redescubrir la carrera y buscar alguna etapa. Además será un ciclista clave en la CRI y la carrera en línea del mundial de Richmond.
Carlos Betancur, sus opciones llegaran hasta donde él quiera, cualidades tiene pero desafortunadamente no rodaron paralelas a lo que él deseaba, su irregularidad ha sido manifiesta originado en los problemas físicos que le acompañaron unidos a un preocupante sobrepeso que al parecer tiene que ver con el disfrute de la buena cocina. Esta temporada se centrara en el Giro del que tiene buenos recuerdos, queriendo mejorar sus resultados, haciendo lo mismo en la Vuelta a España. Su salud parece que le acompaña, por lo que está esforzándose para recuperar el tiempo perdido. Puede ser protagonista de alguna clásica y también del Mundial de Richmond.
Esteban Cháves, recién cumplidos los 25 años y después de un 2013 perdido por una grave lesión, la temporada pasada superó las expectativas propias y las de su equipo el Orica-Greenedge, por lo que esta temporada debería ser la de su consagración como uno de los grandes, tesón y condiciones tiene. Le gusta ir poco a poco, tener una madurez corporal y no solo tener dos o tres meses de un buen nivel.
Sergio Henao, a su equipo el Team Sky, le preocupa que aún no haya concluido el proceso de su recuperación, ya que esto retrasará su plan de carreras, limitándolo a la segunda parte de la temporada. La ansiedad y las ganas que tiene son muchas, pero es consciente de que si hace las cosas mal ahora, lo pagara después. Al equipo aunque le preocupa le pide que siga sin afán, con calma, para reforzar bien la pierna y todo el cuerpo. O sea, que se prepare de la mejor manera para estar en condiciones para después del Giro de Italia. Quizás pueda ser antes, necesita trabajar fuerte y dependiendo de cómo responda. Las prisas nunca fueron buenas ya llegara el momento.
Julián Arredondo, este escarabajo de 26 años siempre sueña despierto con el Tour de Francia y con el tríptico de las Ardenas. El año pasado peco de atacar muy pronto, esa desesperación se tiene que calmar ya que ahora cuenta con más experiencia que aplicada a lo aprendido el año pasado puede que le sirva positivamente esta temporada. La explosividad y sus condiciones para las subidas son las claves para ser optimista antes de su participación en el Tour, donde puede pelear por la montaña y ganar alguna etapa.
Sebastián Henao,  todavía es muy joven (21 años) para esperar grandes triunfos. En su equipo el Sky no le quieren apresurar ni forzar los resultados, su excepcional talento le llevara a destacar en más de una carrera, pero su principal objetivo será continuar el proceso de formación que lo lleve en un futuro cercano a disputar al lado de los mejores, las grandes pruebas del calendario mundial, a él, la maglia blanca del Giro le apasiona. Claro que para ese maillot, hay muchos jóvenes dispuestos a luchar por el, cómo son Fabio Aru, Rafal Majka o los hermanos Yates. La cosa esta difícil, pero no imposible, con trabajo y una preparación adecuada el sueño se puede convertir en realidad.  Darwin Atapuma, es de los escarabajos que más desea hacer una buena temporada en Europa, para entregarle esa alegría a Colombia, lo mismo que desea salir de esa mala racha. Encara esta temporada con aires de revancha ya que el infortunio no le ha dado descanso, en su equipo el BMC confían en él a pesar de que la suerte no está decidida a acompañarle. Con toda seguridad esta temporada mejorará su palmarés. 
Winner Anacona, el tercer escarabajo del Movistar tiene ambiciones, pero sabe que los intereses del equipo está en las grandes vueltas donde los lideres serán Alejandro Valverde y Nairo Quintana, está encantado de trabajar muy agusto para ellos. La única ambición que tiene es lograr una victoria de etapa que de no ser en una vuelta de tres semanas, que sea en las de una o en pruebas de un día. Esta una vez más dispuesto a aprovechar todas las oportunidades que se le presenten. Su triunfo de etapa en la Vuelta a España avaló su fichaje por parte del Movistar, además de la madurez y experiencia que le aportan los 7 años que lleva corriendo en Europa.
Janier Acevedo, quiere borrar y olvidarse de la temporada pasada para así empezar de cero, quiere afrontar esta temporada con confianza y salud ya que su equipo el Cannondale-Garmin ha tenido mucha paciencia confiando en él, por lo que esta temporada les quiere devolver esa confianza buscando resultados. Sus objetivos son destacar en carreras de una semana, desde mañana lo veremos en la Vuelta a Cataluña. Condiciones no le faltan.  
 Dayer Quintana, el hermano menor de Nairo quiere demostrar que está en el Movistar por sus cualidades y no por ser el enchufado de su hermano, posiblemente corra el Giro de Italia ya que el propio equipo dice  que es una carrera ideal para los jóvenes, una carrera en la que se aprende mucho y no hay tanto compromiso. La temporada pasada ya demostró que hace bien su trabajo, además con su victoria se muestra como uno más del pelotón profesional. También sabe y es consciente que le falta mucho, pero el día a día durante esta temporada le puede llevar muy lejos.
José Serpa, desde que se fue a descansar de una exhaustiva temporada, el veterano no ha dado pistas de lo que será su 2015, pero seguramente continuará aportando esfuerzo y ganas al igual que en sus 9 temporadas como profesional. Las fugas y la labor a favor de sus líderes serán la base de su trabajo.
Miguel Ángel López, el pasado 4 de febrero cumplió 21 años, empieza prácticamente en el ciclismo profesional en uno de los mejores equipos que muy seguro lo llevarán tranquilo ya que tiene que aprende mucho, madurar y ver lo que hacen sus líderes en el Astana como Vincenzo Nibali y Fabio Aru estando cerca de ellos en alguna etapa de montaña ya que es su especialidad. Es un escalador que promete buscar alguna victoria de etapa. Esperemos que esta gran promesa no se contamine del poco aire fiable que se respira en el equipo kazajo.
Jarlinson Pantano, el manager del Iam Cycling le prometió que si estaba bien tendría sus oportunidades. Seguramente eso le motive mucho, por lo que intentara sobresalir. De momento ya se marco un objetivo: hacer un top 10 en el Giro de Italia donde tiene experiencia y sabe hasta dónde es capaz de llegar. Sera un objetivo difícil de lograr, pero esta temporada la inicio con el pie derecho al ser 9º en el Tour Down Under.
Edward Beltrán, está totalmente disconforme con lo realizado la temporada pasada, cree haber encontrado las razones de su bajo rendimiento por lo que durante el invierno trabajo duro para poder lograr las metas que se ha propuesto. El Tinkoff-Saxo confía en sus condiciones, dándole un buen calendario, por lo que espera no defraudar.
El último de este análisis es Fabio Duarte. Su equipo el Team Colombia todavía no forma parte del World Tour, pero él continua siendo uno de los referentes de los escarabajos colombianos, por eso se merece el honor de incluirlo junto al selecto grupo de ciclistas que forman parte de la máxima categoría. Empezó la temporada en febrero sin confirmación de las carreras en las que participara. Su sueño y la del equipo era participar en el Giro de Italia, una prueba que él siempre honro y que podría ganar porque confiaba en sus condiciones ya que en los años que ha sido profesional ha tenido muy buenos resultados al lado de los gallos del pelotón mundial. La organización del Giro este año decidió dejarles fuera de la carrera en la que hipotecaron su porvenir en los años anteriores. ¿Cuál será el futuro de este escarabajo y el del equipo?. El tiempo y las carreras en las que participen en Europa darán, su veredicto, que de no ser positivo, podremos estar a las puertas de que se expida el certificado de defunción del equipo y sus escarabajos.  
Las expectativas y metas que se han fijado estas grandes y futuras figuras, no dependen solo del deseo y las buenas intenciones, la disciplina para trabajar, la suerte, la salud y el clima son variables que pueden incidir en los resultados, pero si al menos la mitad de los objetivos propuestos los logran, pasaran a ser sin duda alguna los animadores de una temporada exitosa en la historia del ciclismo colombiano.

Desde aquí os deseo una larga vida a todos los escarabajos

xoves, 19 de marzo de 2015

CLAUDIO CHIAPUCCI

Claudio Chiapucci, naceu en Uboldo, Lombardía (Italia), o 28 de marzo de 1963. Alcumado o Diablo foi un bravo ciclista italiano que polas lesións, e o ter que traballar para outros (Roberto Visentini, Stephen Roche e Urs Zimmermann entre outras figuras), nos seus primeiros anos, fixeron que non destapase o tarro das esencias ata a tempada 1990, ano este en o cal gañou a montaña no Xiro de Italia e, no Tour de Francia, logrou o segundo posto logo de lucir o xersei de Líder durante oito etapas.
Considerado, en efecto, ata 1990 como un escalador de peto e pouco máis, ese ano experimentou unha verdadeira metamorfose: pasou de gregario a líder non só polo golpe de man da etapa que, tralo prólogo, abriu o Tour de Francia e que marcou a lume no desenvolvemento da primeira carreira do mundo, senón porque o seu acceso ao maillot amarelo, primeiro, e a sua valerosa defensa, despois, do primeiro posto da xeral confirmáronlle a si mesmo e a todo o mundo ciclista como un novo valor de entidade con entidade para codearse cos máis grandes. Este cambio foi, sobre todo, sicolóxico que é o que ao cabo, determina a evolución dun deportista de alta competición en calquera especialidade. 
Esta feliz mutación supuxo para a revelación do ciclismo internacional da tempada 90 abandonar dunha vez por todas as funcións de aguador para levar con honor os galons de xefe de fila.
Na súa vida deportiva tamén tivo a mala sorte de coincidir coa época esplendorosa de Miguel Induráin, sendo a súa actuación máis brillante a que tivo lugar no transcurso da decimotercera etapa do Tour de Francia de 1992, con final en Sestriere (Italia). Esa durísima etapa, constaba de 254,5 quilómetros de alta montaña sendo dominada por el desde o principio, xa que estivo escapado 200 km, dos que 125 foron en solitario. Cando se levaban disputados soamente 28 quilómetros o Diablo escapouse xunto con outros bos escaladores (Richard Virenque, Iñaki Gaston, Peio Ruiz Cabestany e Thierry Claveyrolat, entre outros), e tras rodar con eles e ascender os portos de Saisies e Colmet de Roselend (ambos de primeira categoría), foinos deixando na ascensión ao Col d´Iseran, o máis alto desa edición e con máis de 35 quilómetros de subida. Por detrás, os equipos dos dous grandes favoritos para a vitoria final, o Gatorade de Gianni Bugno e o Banesto de Miguel Induráin, tiveron que traballar de xeito abondo case dende o inicio da escapada para que a vantaxe do italiano non fóra en aumento, a consecuencia disto, tanto Induráin como Bugno quedáronse sen gregarios a falta de máis de 110 quilómetros para a liña de meta tendo que asumir o mando e tirar a matar para intentar dar caza ao Diablo.
A falta de empezar a subida ao porto de Sestriere, completamente plagada de xente, un selecto cuarteto formado por: Andy Hampsten, Gianni Bugno, Franco Vona e Miguel Induráin intentaban dar caza a un Claudio Chiapucci cada vez máis fatigado pola calor reinante e polo enorme esforzo de rodar xa máis de 100 quilómetros en solitario. A vantaxe segundo pasaban os quilómetros ía diminuíndo, momento que aproveito Franco Vona para lanzar un ataque ao que só Miguel Induráin foi capaz de responder, os tifosi italianos e o resto de afeccionados ao ciclismo presaxiabamos que finalmente darían caza ao italiano antes da liña de meta, máis aínda cando Induráin puxo a directa marchándose en solitario en busca do bravo corredor italiano, en cada quilómetro o español sacáballe 25-30 segundos, chegándose a poñer a só 30 de diferenza a falta dos 3 quilómetros finais. Pero os dous últimos quilómetros o home do mazo tralo esforzo realizado por Miguelon golpéolle coa suficiente forza para non poder co bravísimo corredor italiano, sendo ata alcanzado por Franco Vona metros antes da chegada, chegando exhausto á meta a 1:45 do flamante ganador Claudio Chiapucci, unha terceira praza para Induráin que sentenciaba ese Tour. Sendo esta sen dúbida una das gestas do ciclismo máis recordado dos últimos anos. 
Un ano antes, tamén gañou a 13ª etapa, con final en Val Louron. Induráin e el escapáronse no descenso do Tourmalet. O Diablo Chapucci gañou a etapa e Induráin o maillot amarelo, que xa non soltaría. Era o primeiro Tour de Francia para o español.
Profesional de 1985 a 1999, durante os cales logrou unha Milán-San Remo, un Xiro do Trentino, unha Volta ao País Vasco, a Clásica de San Sebastián, a Volta a Cataluña, o Xiro do Piamonte, unha etapa do Xiro de Italia, a clasificación por puntos do Xiro de Italia de 1991 e o premio da Montaña de 1990, 1992 e 1993, tres etapas do Tour de Francia, máis a clasificación da Montaña dos anos 1990 e 1991. 
Moitos triunfos, pero menos que o seu valor, xa que ás veces, o valor é a medida e a Claudio Chiapucci, máis que polos seus triunfos recordáraselle polos seus desafíos, e polo seu corazón cheo de impulsos en subidas ou baixadas. Estes son os ciclistas que deixan pegada e que logo de 16 anos da súa retirada todo o mundo lle aclama.
Tamén é considerado como o pai deportivo do desaparecido Marco Pantani.

Trala súa retirada, participou no reality Supervivientes da RAI, en competicións de mountain bike, en Marchas Cicloturistas e en todos os eventos aos que se lle invite. Nunca di non.
Triunfos: 1989, vencedor do Xiro do Piamonte e da Coppa Placci.
1990, vencedor do Gran Premio das Américas, dunha etapa da Paris-Niza e o Gran Premio da Montaña no Xiro de Italia.
1991, vencedor da Milán-San Remo, do Medrisio de Ouro e da Volta ao País Vasco, máis unha etapa.
1992, vencedor da Subida a Urkiola, do Xiro dos Apeninos e do Xiro do Trentino.
1993, vencedor da Clásica de San Sebastián, da Coppa Sabatini e da Japan Cup.
1994, vencedor da Volta a Cataluña, do Tre Valli Varesine, dunha etapa da Volta a Galicia e da Japan Cup. 
1995, vencedor da Escalada a Montjuich, máis unha etapa, da Japan Cup e do Xiro de Piamonte.
Outros resultados dignos de mención: 1987, segundo no Xiro de Toscana.
1990, segundo na Copa do Mundo, terceiro no Gran Premio de Francfort e no Campionato de Zurich e segundo na clasificación xeral final do Tour de Francia.
1991, segundo na clasificación xeral final do Xiro de Italia, terceiro no Tour de Francia e terceiro no Campionato de Italia de fondo en estrada.
1992, segundo no Xiro de Italia, terceiro na Bicicleta de Ouro e segundo no Tour de Francia.
1993, terceiro no Xiro de Italia.
1994, segundo no Campionato do Mundo de fondo en estrada.
XIRO DE ITALIA: 1985 (64º), 1987 (48º), 1988 (24º), 1989 (46º), 1990 (12º), 1991 (2º), 1992 (2º), 1993 (3º, máis unha etapa), 1994 (5º), 1995 (4º), 1996 abandonou e 1998 (60º).
TOUR DE FRANCIA: 1989 (81º), 1990 (2º), 1991 (3º, máis unha etapa), 1992 (2º, máis unha etapa), 1993 (6º), 1994 abandonou, 1995 (11º) e 1996 (37º).
VOLTA A ESPAÑA: 1988 (26º) e 1997 (11º).
EQUIPOS: 1985-1996 Carreira. 1997 Asics. 1998 Ross Mary e 1999 Amica Chips.

domingo, 15 de marzo de 2015

LOS JINETES DEL SKY CABALGAN DE NUEVO

Los ciclistas del Sky continúan vistiendo de negro, pero tras el fracaso en las grandes citas de la temporada pasada, el equipo inglés empezó como una apisonadora esta temporada. Las victorias de Chris Froome en Andalucía, la de Geraint Thomas en el Algarve y la de Richie Porte hoy mismo en la París-Niza confirman el despertar de la bestia, lo que hace que el horizonte negro de su vestimenta comience a tornarse gris para un equipo muy compensado que aspira a todo, demostrándonos que están en el buen camino para encarar una temporada más que esperanzadora.
Estos hombres que defienden el color negro del Sky Team, están golpeando con fuerza en estos primeros compases de la temporada ciclista 2015, han arrancado como un verdadero ciclón en busca del prestigio perdido. Nueve victorias de etapas y tres generales en dos meses y medio de competición, son comparables en estas fechas a la explosión del equipo en la temporada 2012, que termino con Bradley Wiggins en lo más alto del podio en los Campos Elíseos de París.
El fracaso de la temporada pasada, donde ganaron menos de lo habitual y sin mojar en ninguna grande, hizo que este año se pusiesen las pilas para que la bestia se despertase.
Chris Froome, Elia Viviani, Geraint Thomas,  Ian Stannard, Wouter Poels y Richie Porte por partida triple, fueron los ciclistas que se llevaron los honores en las distintas carreras en las que participaron. Los frentes fueron distintos, los rivales también, pero el lucimiento del maillot negro del Sky fue constante, incluso el trabajo de los gregarios ha tenido una parte importantísima en el éxito de sus líderes.
A ningún aficionado al ciclismo se nos puede pasar por la cabeza que tanto Froome como Richie Porte no hayan terminado la temporada pasada dolidos por las derrotas en esos duelos contra sus rivales en las carreteras por donde transito la serpiente multicolor y en la que ellos formaron parte de ese pelotón. Es por eso que esta temporada parece que renacen rodeados de bastante artillería pesada y dispuestos para apuntar muy alto a lo largo de todo el año.
Kanstantsin Siutsou, Peter Kennaugh  o el español Mikel Nieve se unieron a este prometedor inicio de temporada con un gran rendimiento. Los nuevos fichajes como el de Leopold König o el de Nicolas Roche, empiezan a enseñar tímida y progresivamente la buena adaptación al equipo. Elia Viviani demostró con una victoria,  la medalla de plata en Madison 50 km, en los Mundiales de Ciclismo en pista de París y con varios buenos puestos en su remate final, dan al equipo muchas más opciones en las llegadas masivas.
Bradley Wiggins antes de retornar a la pista, promete emociones fuertes en su obsesión por las piedras del pave y el escarabajo Sergio Henao también intentará recuperar el tiempo perdido en la segunda parte de la temporada. Así que si todas las piezas del puzle encajan y la motivación sigue a este nivel, los hombres de negro del Sky Team pueden estar ante una exitosa temporada.
El comandante de esta nave extraterrestre,  Chris Froome, en el primer duelo cara a cara en la Vuelta a Andalucía derrotó por tan solo dos segundos a Alberto Contador. El británico se marchó de las tierras españolas con sensaciones más que positivas tras derrotar en casa a su principal rival. Los dos tienen como gran objetivo de la temporada el Tour de Francia por lo que el camino hasta llegar a julio será largo para ambos.
Tras ese importante golpe de moral, Froome explicaba que “Es una victoria especial ya que es la primera carrera de la temporada, tengo mucho que hacer antes de llegar al Tour. Quiero seguir en este camino, mantenerme saludable y sin lesiones, y construir gradualmente mi forma”.
La actuación personal de Froome, unida al buen inicio de su equipo que con este resultado seguro que le servirá para encarar con más convencimiento los retos mayúsculos de esta temporada.
Esa misma semana en Portugal, Richie Porte ganaba una etapa y Geraint Thomas la clasificación general en el Algarve. Geraint Thomas alentado por lo que estaba haciendo su Capo en las cercanas tierras andaluzas, brilló con una calidad insospechable y apoyado en un magistral trabajo de su equipo se llevó la general por delante del actual Campeón del Mundo Michal Kwiatkowski. El jinete de negro también inglés y con solo 28 años cabalgo hasta la victoria en solitario en la segunda etapa y ya nadie le pudo arrebatar el liderazgo, gracias a la exhibición del Sky en la etapa reina que culminó con la victoria de un pletórico Richie Porte.
Toda una enorme inyección de moral para el equipo que en los dos frentes lo hicieron muy bien, empezando a construir la segunda fase de carreras.
El ganador en el Algarve, es un ciclista trabajador y sorprendentemente poco asiduo al lucimiento individual, mostrándose muy satisfecho y feliz con su rendimiento y pensando en los próximos objetivos de su equipo.
En este exitoso inicio de temporada del Sky, hay otro nombre que salta a la vista en las filas de los hombres de negro, es el australiano Richie Porte que quiere demostrarnos que la mala temporada pasada solo fue un bache en su carrera, encarando con ilusión y moral el camino hacia el próximo Giro de Italia donde será el líder del equipo.
Hasta el momento en esta temporada ya tiene en el bolsillo cinco victorias; la contrarreloj del Campeonato de Australia, la quinta etapa del Down Under, la etapa reina del Algarve y la 4ª y 7ª etapa de la París-Niza, en seis carreras disputadas. En la cronoescalada del último día con final en el puerto Col d´Eze, sentencio la carrera al ser el más rápido de la etapa, arrebatándole el maillot de líder al francés Tony Gallopin, sumando así su segunda victoria en esta ronda, tras la conquistada en 2013. Él espera seguir a este magnífico nivel para brillar de una vez por todas en alguna de las grandes vueltas por etapas.
Otro de los hombres de negro en el Sky es el español Mikel Nieve, que tras su segunda temporada en las filas del Sky es un ciclista con conocimiento de causa que debutó de manera inmejorable en Andalucía añadiéndose a la  línea ascendente del equipo ya que fue clave en la victoria de Froome mostrándose en  un buen estado físico y acabando en un meritorio cuarto puesto en la clasificación general, confirmando las sensaciones positivas del equipo. Algo muy bueno para la moral de todos.
Hasta el momento presente, el contexto de los hombres de negro del equipo Sky Team parece el adecuado, muy activos, ambiciosos, con la motivación y la moral por las nubes, forman una plantilla muy compensada y con una  enorme calidad para aspirar a los objetivos más ambiciosos tanto en las clásicas como en  las Vueltas  por etapas. Están de vuelta y más enrabietados que nunca. El inicio explosivo parece augurar una más que placentera temporada. Aun así, por si no lo saben, tienen que pulir detalles de estrategia, como el que casi les condena al fracaso en la tercera etapa de la Vuelta a Andalucía con el ataque del Pistolero de Pinto. Sé que son pequeños detalles, pero precisamente por el simple hecho de ser pequeños detalles, les pueden llevar a la victoria o al fracaso.
La maquinaria en la montaña está rindiendo, el engranaje engrasado progresivamente, les esta llevado a un buen ritmo a alcanzar los objetivos marcados.

Sus rivales tienen que estar muy atentos, estos jinetes de negro sobre sus bicicletas quieren volver a arrasar, de momento fueron los primeros en golpear, y como dice el refrán El que golpea primero golpea dos veces”.

xoves, 12 de marzo de 2015

EUGENE CHRISTOPHE

Eugene Christophe, alcumado nun principio como “Cri-Cri”, logo como o “Vello Galo”, polo seu impresionante bigote, naceu en Malakoff, Altos do Sena (Francia), o 22 de xaneiro de 1885. Faleceu aos 85 anos o 1 de febreiro de 1970 no hospital Broussais de Paris.
O seu nome posiblemente non diga gran cousa aos mozos afeccionados ao ciclismo, ao tratarse dun desventurado corredor que axudou máis que ningún outro a labrar a lenda que acompaña ao Tour de Francia. Pero este parisino foi un dos grandes ciclistas que houbo en Europa entre 1910 e 1920, unha serie de desgraciadas averías impedíronlle conquistar o seu gran soño, proclamarse gañador do Tour na súa cidade natal. 
Foi un ciclista francés campión da época heroica e exemplo de longevidad deportiva, pero decisivamente marcada polas desgrazas que lle acompañaron nos momentos máis importantes, converténdolle nun dos malditos do Tour. Sempre se dixo que a Grand Boucle elixe aos seus heroes, ciclistas aos que todo lles sae de cara. Ese non foi o caso de Eugene Christophe.
Correu once veces o Tour de Francia, perdéndoo polo menos dous por mala sorte, xa que nas dúas rompéuselle a horquilla da bicicleta cando acariñaba a vitoria na proba. No 1913 rompeu a horquilla da súa bicicleta baixando o Tourmalet ao ser atropelado por un coche e tendo que cubrir 10 quilómetros a pé. Era virtual líder pero perdeu catro horas. Naquela época o reglamento prohibía calquera tipo de asistencia en estrada, tendo que ser o propio ciclista quen reparase a avería. En Sainte Marie de Campan, logo de andar quince quilómetros atopou unha forxa onde reparou a horquilla da súa bicicleta pero todos os seus soños de vitoria habíanse esfumado. Igual pásolle no 1919, coa vitoria prácticamente asegurada, novamente rómpeselle a horquilla, outra avería que ten que reparar o mesmo sen ningunha axuda externa para evitar ser descualificado, en dita reparación tarda dúas horas, volvéndoselle a esfumar todas as opcións de vitoria. Foi o primeiro en vestir o maillot amarelo, creado en 1919 cando Henri Desgrange querendo distinguir máis fácilmente e honrar ao líder da xeral na 11ª etapa Grenoble-Xenebra, Eugene Christophe tivo o honor de lucir o  devandito maillot.
De profesión ferreiro, a súa paixón pola bicicleta comezou desde moi pequeno, o que terminou derivando en que participase aos 18 anos na disputa da súa primeira carreira converténdose ao ano seguinte en ciclista profesional que aínda que nunca gañou o Tour de Francia, posiblemente foi un dos derrotados con máis peso na historia da proba francesa.
Era un ciclista potente, extraordinario escalador e un dos corredores máis audaces nos descensos naqueles tempos. En 1906, con só 23 anos correu o seu primeiro Tour, quedando noveno. O seu futuro parecía esplendoroso. En 1910 gañou a Milán-San Remo, pero custáballe asomarse aos primeiros postos do Tour porque se vía lastrado seriamente polo sistema de competición. Naquela época o gañador decidíase grazas á clasificación por puntos e non por tempos, un reglamento que concedía unha gran vantaxe aos ciclistas máis versátiles e especialmente aos velocistas. Foi precisamente Eugene Christophe o que obrigou a poñer fin a aquela inxustiza.
En 1912 foi de longo o mellor da súa carreira, gañou tres etapas consecutivas de montaña metendo verdadeiras minutadas aos seus rivais, pero o belga Odile Defrave, ben secundado polos seus paisanos, impuxo a súa velocidade para levarse o Tour. Os organizadores do Tour entenderon que chegara o momento de cambiar e que fose o cronometro o que decidise o ganador da carreira. Unha gran noticia para el, que con 28 anos estaba preto de chegar ao seu cume como ciclista. Por iso preparouse a conciencia para a seguinte edición.
Unha tempada 1913, que debería ser o da gloria, pero que se derrubou de forma inesperada. As agotadoras primeiras cinco etapas (388, 364, 405, 470 e 379 quilómetros cada unha), dispútounas con tranquilidade e paciente á espera do sexto día, unha etapa que unía Bayona con Luchon e na que o pelotón debía superar os portos de Oschquis, Aubisque, Soulor, Gourette, Tourmalet, Aspin e Peyresourde. Unha verdadeira barbaridade. Confiados na fortaleza do seu xefe de filas, o seu equipo o Peugeot, impuxo un ritmo esixente de saída coa idea de esnaquizar ao grupo. Cando chegaron ao Tourmalet xa só o seguia o belga Thijs, un ciclista que cedera bastante tempo nas primeiras etapas. Na cima do coloso dos Pirineos a clasificación virtual dicía que era o líder con case vinte minutos de vantaxe sobre o segundo. Pese a todo lanzouse con decisión no descenso. De súpeto sentiu que lle custaba mover o manillar e que apenas lle freaba. Con espanto comprobou que a horquilla rompeuse. Maldixo a súa mala sorte mentres pasaban os minutos e empezaban a pasarlle os corredores aos que deixara na ascensión. A reglamentación daquela época prohibía a axuda externa nas reparacions baixo ameaza de expulsión, polo que non lle quedou máis solución que cargar ao ombreiro a seu bicicleta e percorrer a pé os nove quilómetros que lle separaban de Saint Marie de Campan. Fíxoo chorando de rabia por un Tour que se lle ía das mans. Á entrada do pobo un mozo levouno ata unha herrería próxima. Chegou a ela e el mesmo tivo que botar man de fórxaa e do martillo para arranxar a avería baixo a atenta vixilancia dun árbitro da carreira e dun par de enviados dos equipos rivais, preocupados de que se coidase a pureza do Tour. Ata lle sancionaron con dez minutos porque o neno axudoulle a darlle aire co fuelle. Tres horas logo de sufrir a rotura volveuse a subir á bicicleta para acabar a etapa e despedirse da vitoria na xeral.
Logo chegaría a Primeira Guerra Mundial, na que combateu. Tivo que colgar a seu bicicleta durante catro anos, índoselle moitos dos seus mellores anos, pero non perdeu a esperanza de que o Tour aínda tivese un pequeno pedazo de gloria para el. Volveu en 1919 a estar na liña de saída coa máxima carga de ilusión. A sua regularidad non tardou en levarlle ao liderato, tendo o honor ata de ser o primeiro ciclista en vestirse de amarelo. Sucedeu na sétima etapa despois de que lle suxerisen a Henri Desgrange, o organizador da carreira, que deberían identificar ao líder cunha camiseta de diferente cor. Elixiron o amarelo por casualidade. E así, vestido como un canario, plantouse na penúltima etapa con media hora de vantaxe sobre o segundo. Nun tramo empedrado a horquilla da súa bicicleta volveu saltar polo aire. Esta vez só estaba a unha hora dun lugar onde podía reparala, pero deixouse no esforzo case dúas horas, as suficientes para que o tren do Tour de Francia escapáseselle para sempre.
Xa nunca máis podería chegar á súa cidade natal con ese maillot amarelo. A carreira que tanto quixo e á que tanto maldixo quixo homenaxealo como se merecía e non atopou mellor sitio para facelo que a fragua na que se deixou en 1913 as súas esperanzas de vitoria. Acompañáronlle os xuíces daquela tarde amarga e ata o neno que tratou de botarlle unha man. Na entrada de dita forxa colocaron unha placa na que aínda hoxe se pode ler: Eugene Christophe, líder da proba, perdeu aquí toda opción de vitoria, pero aínda así deu unha formidable lección de coraxe e de tenacidade. O Tour de Francia continúa recordando con todo respecto aquel comportamento exemplar e que logo daquela mítica etapa en 1913 gozaba de gran popularidade entre o público francés. Un público que sentía unha gran simpatía polo ciclista, debido ás súas actuacións pasadas, mobilizouse cunha furia desmedida cara á súa figura, ante o que o xornal L´Auto organizou unha suscripción popular coa que lle pagaron a mesma cantidade de diñeiro que si fose o gañador da xeral final de 1919. Aínda así o consolo non foi suficiente. 
Profesional de 1904 a 1926.
Retirouse habendo participado en once edicións do Tour de Francia, das cales puido finalizar en oito, ademais de vivir unha guerra cando se atopaba no punto cume da súa carreira. En 1925 con 40 anos, disputou o seu último Tour, 19 anos logo de participar por primeira vez. Os seus mellores anos pasaran, pero aínda así o seu orgullo permitiulle finalizar na 18ª posición final da carreira, aínda que esta vez moi lonxe de poder pelexar pola vitoria final. 
TRIUNFOS: 1909, Campión de Francia de ciclocross e vencedor da París-Calais.
1910, Campión de Francia de ciclocross, vencedor da Milán-San Remo e do Circuíto do Brescia.
1911-1912 e 1913, Campión de Francia de ciclocross.
1914, Campión de Francia de ciclocross e vencedor da Polymultipliée.
1920, vencedor da Burdeos-París.
1921, Campión de Francia de ciclocroos e vencedor da Burdeos-París.
1925 e 1926, vencedor do Circuíto de Borbonés.
Nunca participou no Xiro de Italia nin na Volta a España.
TOUR DE FRANCIA: 1906 (9º), 1909 (9º), 1911 abandonou, 1912 (2º, máis tres etapas), 1913 (7º), 1914 (11º), 1919 (3º), 1920 e 1921, abandonou, 1922 (8º) e 1925 (18º).
Outros resultados dignos de mención: 1909, terceiro na Paris-Bruxelas, 1910, terceiro na París-Roubaix, 1911, segundo na Volta a Bélxica, 1917, terceiro na París-Tour, 1920, segundo na París-Roubaix, e en 1921, terceiro na París-Tour e segundo na París-Brest-París.
EQUIPOS: 1904-1906 Labor, 1907-1911 Alcyon, 1912-1918 Peugeot-Wolber, 1919-1921 A Sportive, 1922 Automoto-Wolber-Russell, 1923-1924 Chritophe-Hutchinson, 1925 JB Louvet e 1926 Chritophe-Hutchinson/Peugeot-Dunlop
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domingo, 8 de marzo de 2015

EL CICLISMO ESPAÑOL SEGIRA VIVO

Primera semana del tercer mes de la temporada 2015 y la actualidad ciclista como cada año no cesa.
Sabido es por todos del anuncio de Alberto Contador en la presentación de los equipos de su fundación, de que el próximo año posiblemente sea el último que le veamos sobre una bicicleta compitiendo al máximo nivel profesionalmente.
También, todos sabemos, que él siempre ha declarado públicamente que solo seguiría mientras tenga piernas para seguir ganando vueltas, y que por tanto, quiere retirarse en el punto álgido de su carrera deportiva, sin esperar a su declive.
Ante esta declaración pudimos comprobar el gran revuelo en el mundo del ciclismo. Unos, los compañeros de profesión, expresaron su sentir ante tal noticia, como el caso de Chris Froome, que declaro que él seguirá, si puede, hasta los cuarenta.
Otros, como la prensa, patrocinadores, jefes de equipo, lo ven como el fin de un ciclo. Esta marcha de Contador, junto con las más que probables en un futuro cercano de Alejandro Valverde, y Purito Rodríguez, dejan huérfanos al ciclismo español, ya que los que vienen por detrás todavía no empujan lo suficiente para poder llenar ese hueco tan grande y todo lo que con ello significa, sobre todo pensando en el apoyo publicitario.
Desde el punto de vista de un cicloturista, yo me siento más identificado con los ciclistas como Iván Basso, Chris Horner, Davide Rebellin, Jens Voigt, o el propio Chris Froome, que según acaba de declarar seguirá hasta los cuarenta años. A esta gente le apasiona la bicicleta hasta tal punto que posiblemente les será difícil verse haciendo otra cosa, ya que solo quieren pedalear y pedalear disfrutando de ello mientras el cuerpo les aguante. No son esos auténticos depredadores de ansia de victoria, y aunque saben que no van a poder alcanzarla, tampoco por ello pierden la motivación. Que puede que sea el caso del Pistolero de Pinto.
Estamos mentalizados que la época de apogeo está tocando a su fin, tras una saga de grandes ciclistas, de grandes éxitos y de ilusión, puede que haya quien vea el futuro negro, que no vean ese relevo generacional a los Contador, Oscar Freire, Purito, Samuel Sánchez, Carlos Sastre o Alejandro Valverde, que piensen que el oscurantismo se cierne sobre nuestro ciclismo, al que ellos presuponen una época de sequía futura. Pero lo visto en este inicio de temporada deja margen a la esperanza.
El arranque de esta nueva temporada ha traído consigo mucho optimismo para el futuro del ciclismo español. Un futuro que se veía negro pero cuyas expectativas han subido tras los éxitos de hombres como Juanjo Lobato o Rafa Valls y el buen momento de otros como Beñat Intxausti, Ion Izaguirre, Jonathan Castroviejo o Rubén Fernández. Puede que no sea un relevo de tanta calidad como la que atesoran los Contador, “Purito” o Valverde. Pero el futuro, a priori, parece que empieza a ser esperanzador y puede que esté garantizado.
No solo por las victorias sino también por las sensaciones. Además, el relevo parece llegar en diferentes dosis, con escaladores, con clasicómanos y también, con velocistas. Las victorias con finales  en repecho de Juan José Lobato  en las tres que ha disputado este año como fueron la del Tour Down Under, la de Lucena y Alhaurin en la Vuelta a Andalucía ante velocistas de nivel, me hace pensar que tenemos rematador para años, erigiéndose como la punta de lanza de esta nueva generación. Está en un momento de forma muy dulce y, a este nivel, muy pocos podrán batirle. Ya lo demostró el año pasado con resultados de mucho prestigio y, sobre todo, el cuarto puesto en la Milán-San Remo le dio mucha moral. Es un ciclista que se ha ido puliendo y encontrándose a gusto en esos terrenos explosivos que con su forma de saltar, fácil y dando esa sensación de sencillez que hace que sus rivales se desesperan, como ha ocurrido con Degenkolb en la Ruta del Sol. Su estilo y formas de correr nos hace recordar, en muchos momentos, a Óscar Freire. Esta temporada 2015 parece destinada a que Juanjo Lobato gane en numerosas llegadas rápidas. Puede que no sea el más rápido del pelotón pero sí uno de los más explosivos y eso hará que los finales al sprint sean territorio privado del andaluz. Nuevamente la Milán-San Remo que aunque no tiene ese repecho final, la dureza acumulada en la última parte hace que sea su objetivo más ambicioso de esta temporada.
El gran triunfo de Rafa Valls a sus 27 años ante los mejores del mundo en Omán  como: Vincenzo Nibali, Valverde y “Purito”, hacen que de un golpe encima de la mesa y, a pesar de ser considerado un gregario, podría liderar al Lampre en carreras menores. La victoria conseguida en Omán es la de mayor prestigio de su carrera, aunque ya se había impuesto en el Mirador del Potrero en el Tour de San Luis en 2010 pero este triunfo es más especial porque lo con siguió en medio de una legión de estrellas. No es un novato aunque si es un ciclista con mala suerte en sus equipos, el Geox y Vacansoleil desaparecieron cuando él tenía contrato en vigor, las caídas también se cebaron con él en varios momentos de su carrera.
Además de las victorias de esta nueva generación, las buenas sensaciones de hombres como: Beñat Intxausti, Mikel Nieve, Ion Izagirre, Jonathan Castroviejo, Rubén Fernández o Jesús Herrada, hacen de este inicio de temporada  que las esperanzas aumenten.  Los dos primeros en Andalucía, acabaron tercero y cuarto respectivamente. Intxausti lideró con paso firme y decidido al Movistar. Mikel Nieve, estuvo apoyando a su líder en todo momento y sabiendo buscarse la vida en solitario cuando Chris Froome se iba al zafarrancho de combate contra el Pistolero de Pinto.
Por otro lado, la calidad de Izagirre como escalador completo es indiscutible y su inicio de temporada está siendo muy positivo, con el tercer puesto en Malhao, acabando décimo en la general final de la Volta al Algarve y siendo undécimo en Murcia.
Por su parte, tanto Castroviejo como Herrada fueron protagonistas en la carrera lusa, intentando llegar a la gloria por medio de escapadas. Y por último, Rubén Fernández, que debutaba en el equipo Movistar esta temporada, lideró al equipo en las carreras montañosas como el Tour Down Under, donde fue tercero en la etapa reina, finalizando quinto en la general final, en el Algarve fue muy regular y acabó entre los diez primeros.
Ninguno de ellos es excesivamente joven, están en la edad de despuntar, de explotar y crecer definitivamente como ciclistas. En este 2015 deberían dar el salto definitivo. Puede que no sea una generación tan prolífica como la de los años 2000, pero el ciclismo español seguirá muy vivo tras la década de los Contador, “Purito” y Valverde en los próximos años.
A parte de estos aquí mencionados, en el Caja Rural hay varios ciclistas, también jóvenes, llamados a ser el relevo de la generación actual. El que mejor arranco en esta recién estrenada temporada 2015 es Miguel Ángel Benito, un ciclista muy completo que se desenvuelve bien en grupos pequeños. Fue cuarto en la clasificación de los jóvenes en la Estrella de Besseges. Por otro lado, el escalador Omar Fraile de momento en este arranque de temporada no ha tenido mucha suerte pero apunta fuerte al igual que el rematador Carlos Barbero, actualmente lesionado, pero con grandes cotas por superar.
Por tanto, este inicio de 2015 está siendo esperanzador para el ciclismo español. Ya sé que muchos dicen que no hay relevo y quizás sea verdad, yo hace unos meses también pensaba igual debido al altísimo nivel que vivía el ciclismo español. Pero la calidad y los triunfos en este inicio de temporada, me hacen creer que en un futuro próximo los éxitos parecen asegurados con esta nueva hornada de jóvenes ciclistas que ya están llamando a la puerta con fuerza y ganas de demostrar lo que valen.
Estos son los triunfos de los ciclistas españoles en este 2015 hasta la actualidad:
Tour Down Under, Juanjo Lobato vencedor de la 2ª etapa.
Challenge de Mallorca, Alejandro Valverde vencedor del Trofeo Serra de Tramuntana.
Tour de Catar, José Joaquín Rojas vencedor de la 1ª etapa.
Vuelta a Andalucía, Javi Moreno vencedor del 2º sector de la 1ª etapa. Juanjo Lobato vencedor de la 2ª y de la 5ª etapa. Alberto Contador vencedor de la 3ª etapa. Pello Bilbao vencedor de la clasificación de la montaña.
Tour de Omám, Rafa Valls vencedor de la 4ª etapa y de la clasificación general final.