¡VAYA SI LA LIÓ!

ESTA JOVEN AL VOLANTE DEL COCHE DE SU ABUELO CON
0´91 DE ALCOHOL Y COCAINA ESNIFADA, MATO A 3 CICLISTAS

Mientras la serpiente multicolor disputa el centenario Giro de Italia sin ninguna intención de levantar el luto y con alguna lágrima furtiva por Michele Scarponi. Las caídas, las escapadas, las pájaras y las victorias convivirán durante estas tres semanas con los recuerdos.

Sin embargo fuera de la carrera pero dentro del mundo del ciclismo ocurrieron sucesos extraños.

En algunas ocasiones los planetas se alinean para que sueños y proyectos se confundan.

Habían quedado a las seis de la mañana para, como otros muchos domingos, pedalear juntos. Por ser el Día de la Madre, no estaban todos los que deberían estar; la mitad de la grupeta habían fallado. No pasa nada. Los seis amigos más fieles a la bicicleta y ajenos a la tragedia, pensando en que los vientos les fueran propicios, se enfundaron el maillot, se colocaron el casco y se dispusieron a ejercitar las piernas.

En el otro extremo de la constelación planetaria, también era domingo, Día de la Madre, pero la noche anterior de fiesta había sido muy agitada debido al alcohol y a la droga. A pesar de amanecer sin haber dormido, bebida y drogada decide coger el coche.

Los dos extremos se cruzan a las 8:38 horas, en una larga y soleada recta con excelente visibilidad, y sucede la tragedia. Ella invade el carril contrario, por el que los ciclistas llegan pedaleando juntos. La escena es dantesca. Dos de ellos mueren en el acto, tres más quedan gravemente heridos, aunque, cinco días después, uno de ellos no puede recuperarse de sus lesiones y fallece en el hospital. Sólo el que iba en cabeza del pelotón, se libra de la apisonadora por muy poco, tirándose al arcén de su derecha.

AGENTES DE LA GUARDIA CIVIL EN LA ZONA DEL ACCIDENTE
MORTAL

Fue un impacto brutal con cinco compañeros aplastados contra la valla protectora, pedazos de bicis desperdigados por la carretera (y cosas peores).

¿Y la loca esa?. La loca se había ido a unos 200 metros apartada del lugar del impacto, había detenido el coche y fuera del, sin ser consciente de lo que había ocurrido, se sentó sobre la tierra, con la cara desencajada y con los síntomas de haber bebido mucho, estaba ida y no respondía. Por sus venas corría sangre llena de alcohol y cocaína. Las dos pruebas de alcoholemia que se le practicaron arrojaron 0,80 la primera y después 0,91 (casi cuatro veces la permitida), esto significaba que había bebido hasta muy poco antes del atropello. También dio positivo en cocaína.

En los últimos años, la fiesta le había hecho perder los papeles en más de una ocasión. No era la primera vez que esta joven conducía borracha y drogada. Su propia madre había dicho al saber que había cogido el coche del abuelo: “La niña la va a liar…”. ¡Y vaya si la lió!.

Decimos que la va a liar pero no hacemos nada para prevenirlo. ¿Si sabía que la iba a liar porque no aviso a la guardia civil?. Sería mejor que estuviese sin carnet unos años que sin carnet, entre rejas y con tres muertos. La sociedad es demasiada permisiva con la conducción y el alcohol.

Personalmente creo que la madre es otra irresponsable, si sabe que su hija no puede coger un coche, ¿Por qué no evita eso y la denuncia a la policía?. Qué fácil es lloriquear y no asumir las culpas. La niña que la lió es mayor de edad y por supuesto que  sabe lo que está bien o mal. Conducir bajo los efectos de las drogas y el alcohol es de puro demente criminal. Consecuencia: muertos, vidas que se ha llevado y que no volverán y dolor en familias destrozadas. Y lo malo de todo esto es: ¿cuántos realizaran lo mismo todos los días?.

LA POLICÍA LA ENCONTRÓ ASÍ A 200 METROS
DEL LUGAR DEL IMPACTO

Drogas, alcohol, tatuajes, conductas temerarias e imprudencias conscientes traen estos resultados mortales ocasionados por la juventud de hoy.

Espero y deseo que se saquen conclusiones, eduquemos a nuestros jóvenes con otra cultura y valores, para que la diversión española no sea la droga y el alcohol.

Las bicicletas en las carreteras nunca serán un peligro, conducir bebido y drogado es un delito. Un crimen.

Si te metes una burrada de alcohol premeditadamente, si te metes coca en tu cuerpo premeditadamente; premeditadamente no te pongas al volante.