ROBERT MARCHAND |
Robert Marchand, es un joven con años que nació en Amiens (Francia) el 26 de Noviembre de 1911, ex bombero y ex boxeador vio como su afición por la bicicleta se truncaba por las dos guerras mundiales que vivió, siempre fue un apasionado del ciclismo. Retomando la afición cuando se quedo viudo a los 78 años, porque pensaba que si se quedaba en el sillón viendo la tele estaba perdido, por lo que ahora con cerca de 101 años es el ciclista centenario más rápido en la distancia de 100 kilómetros, al recorrer esa distancia en 4 horas 17 minutos y 27 segundos en un velódromo de Lyon, a una media de 23 k/h., sin dar muestras de fatiga, aunque reconoció que en los últimos kilómetros sintió cierto dolor en una mano y en el trasero.
Pocos minutos después de completar las 300 vueltas del velódromo, Marchand aseguraba que: “No había hecho esto para ser campeón, lo ha hecho para probar que la raza humana, a condición de no hacer excesos, puede vivir bien hasta los cien años”.
Ya en febrero pasado batió en un velódromo de Suiza el récord de la hora para centenarios, que fijó en 24,25 kilómetros.
Ambas pruebas fueron homologadas por la Unión Ciclista Internacional (UCI), que creó la categoría de centenarios gracias a Robert Marchand.
La proeza de Marchand ha despertado una gran atención mediática en Francia y del público que se acercó a seguir su hazaña y no dudó en pedirle autógrafos, que este joven con años firmó con agrado.
Sonriente y orgulloso, aseguró que durante toda su vida apenas ha hecho excesos, nunca fumó, no bebió demasiado alcohol y cuidó mucho su alimentación.
El único doping que conoce, es su baso de vino tinto en cada comida, ya que probo las bebidas energéticas, pero dice que le daban dolor de estómago y que lo único que necesita es agua con un poco de miel.
Antes del batir el record y como preparación hizo los cien últimos kilómetros de la París-Cambrai. Afirmando que “Me pareció menos duro, porque hay cuestas y, como no voy muy deprisa, las subo bien, pero al bajar no tengo que pedalear. En el Velódromo no puedes para de pedalear en ningún momento”.
Ha corrido ocho Burdeos-París, cuatro París-Roubaix y doce Ardechoises, pero él no quiere ser tratado como un fenómeno.
Robert Marchand no descarta afrontar en el futuro otras pruebas similares y eso sin necesidad de complejos sistemas de entrenamiento, ni hormonas, ni testosterona, ni EPO, ni ninguna otra clase de trampas, porque ganar con trampas es perder, queda claro que todo se puede alcanzar sea cual sea la edad.
Las hazañas de Marchand, son un aliciente para que nos motivemos a seguir sus pasos.
Estimado José Manuel.
ResponderEliminarSoy Jordi Escrihuela, redactor jefe de la Revista Pedalier. Me ha encantado tu entrada sobre Robert Marchand. Me gustaría publicarla, en tu nombre, lógicamente, en el próximo número de la revista.
También había pensado, si os apetece, sacar vuestra Peña en la sección El Club. Si me quieres hacer una redacción o prefieres pasarme los datos y la confecciono yo mismo. Lo que te sea más cómodo. Necesitaría por eso foto de todos los miembros en alta resolución y escudo o logo de la Peña. Quedo a tu disposición. Mi correo es: jordie58@hotmail.com.
Saludos cordiales.
Por supuesto, te enviaría una revista.
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