domingo, 22 de xuño de 2014

¿PORQUE EL GIRO DE ITALIA 2014 NO EMOCIONO?

El Giro de Italia desde el punto de vista del espectador y del aficionado fue muy flojo, decepcionante, no me emociono ni me  engancho.
Desde que se conoció en octubre de 2013, ríos de tinta se derramaron  criticando el recorrido. Hoy, después de lo visto, tengo que dar la razón a esa lluvia de críticas a un recorrido que fue un completo desacierto. Un desacierto que en parte beneficio a los escarabajos colombianos Nairo Quintana y Rigoberto Uran, (1º y 2º respectivamente).
Las claves de ese desacierto que condicionó y redujo las posibilidades del espectáculo yo creo que fueron:
1º.- Excesivos finales en alto. Esto fue lo que provocó que los favoritos no atacasen de lejos, dejando incluso que llegasen las escapadas, por lo que la emoción que daba la fuga era la que salvaba la etapa y la lucha por la general se resolvía con la clásica mirada de reojo para al final no pasar nada. Además de ello, condiciona la participación de los sprinters de alto nivel, prueba fue que el único sprinter nato y de perfil no-escalador fue Marcel Kittel, lo mismo podríamos decir de los contrarrelojistas ninguno de los números uno en la lucha contra el crono participaron este año.
2º.- Las etapas más duras en la tercera semana. Esto provoco que las dos primeras semanas los ciclistas ahorraran fuerzas para la última semana, reduciendo los ataques y evitando el desgaste de fuerzas. Etapas que en un principio estaban pensadas para dar espectáculo como eran la de Oropa, Montecopiolo o Montecassino fueron subidas casi a ritmo por todo el pelotón, incluyendo a los favoritos que se reservaron para los ataques en el último kilómetro. Los resultados debido al bajo ritmo con que subieron, es que Diego Ulissi, un ciclista no escalador ganó dos etapas con final en alto, que eran ideales para dar la batalla los escaladores y favoritos a la general.
3º.- No hubo contrarreloj llana. La primera contrarreloj fue de sube y baja, con la subida inicial y la segunda fue una cronoescalada a un puerto bastante duro. Esto ocasionó que los buenos escaladores llegasen sin tiempo perdido a las etapas de alta montaña e incluso de líderes, lo cual los dejo en una situación que no necesitaron atacar. De haberse disputado una etapa totalmente llana habría marcado más diferencia a favor de los ciclistas rodadores, incluso el propio Cadel Evans habría estado más días de líder y no se habría eliminado tan pronto de sus opciones de ganar la carrera, y el resto de favoritos se hubieran visto obligados a atacar.
4º.- La etapa más dura de este Giro fue la 20ª. A falta de tres días para finalizar el Giro, todo estaba decidido. Ni Nairo Quintana necesitaba atacar para ser el Campeón, ni Rigoberto Uran tenía opciones de atacar para asaltar el liderato ni tampoco temía perder su segundo puesto ya que los cuatro siguientes en la general parecían conformes con sus posiciones en la general. Si Uran hubiese llegado con Nairo en Val Martello, Nairo habría atacado muy fuerte en Panarotta y Zoncolán, con la intención de coger el liderato, pero como ya era líder, no se vio en esa necesidad.
Con muy pocas modificaciones habríamos visto un Giro deferente, emocionante, espectacular y sobre todo engancharía a todo el mundo:
1º.- La cronoescalada tendría que disputarse en la 20ª etapa. Seguramente para los ciclistas con opciones a los puestos de podio, sería el último esfuerzo a un todo o nada para ocupar esos tres ansiados puestos.
2º.- La contrarreloj totalmente llana. De haber sido así, los escaladores hubiesen perdido tiempo, teniendo que luchar para recuperarlo en las etapas de montaña, cosa que no necesitaron hacer en este desacertado Giro.
3º.-  Una etapa de alta montaña menos. La tercera semana tendría que haber tenido una etapa de alta montaña menos, cambiándola por una llana y la cronoescalada junto con una rompepiernas se pasaría de 4 a 2 donde habría habido lucha según los tiempos de cada cual en la general.
4º.-  La subida al Zoncolán. Una subida como el Zoncolán, se tendría que haber disputado en la segunda semana cuando los escaladores tienen aun tiempo perdido y las fuerzas no están mermadas para intentar los ataques.
Resumiendo: Si hay equilibrio entre contrareloj individual y montaña, la carrera la gana el ciclista más completo, o sea el escalador que mejor haga la contrarreloj individual, o el contrarrelojista que mejor pase la montaña y cada cual ataca cuando está fuerte.
En fin: Con un recorrido equilibrado se garantiza el espectáculo, que es lo que precisamente necesita el ciclismo actual para volver atraer patrocinadores y volvamos tener varios equipos elite.
Yo creo que el Giro ciertamente tuvo un diseño nefasto, desequilibrado y claramente recargado a favor de un superclase por eso el ganador fue Nairo Quintana, el ciclista que demostró ser el más completo, el que mejor soporto las inclemencias del tiempo y su enfermedad, el que gano en las etapas claves cuando vio que a sus rivales los efectos del clima y la dureza de la etapa les hacia mella. Vio flaquear a Rigoberto Uran y lo ataco bajando cuando todavía faltaban muchos kilómetros a meta. Etapa clave y ataque preciso en el momento exacto que le hizo ganar el Giro de Italia 2014.

Ese día se acabo la carrera, gano el mejor y no fue otro que el escarabajo Nairo Quintana.

Ningún comentario:

Publicar un comentario